Una de las primeras cosas que la gente exitosa se da cuenta es el viejo adagio: "Si va a ser así, depende de mí".
Para ti, eso significa que tu éxito, tu curso depende de ti. Esto no significa que lo hagas solo. Simplemente significa que asumes la responsabilidad de tu vida y tu carrera.
Demasiadas personas hoy en día consideran la oportunidad y piensan que depende de otra persona asegurarse de obtenerla. Esperan y esperan, pensando que depende de alguien más, y luego la espera se termina, y es demasiado tarde para hacer algo. Sus vidas han terminado y están llenos de arrepentimiento.
Pero esto no es cierto para ti. Sabes que debes asumir la responsabilidad de tu vida. Es tu decisión.
El hecho es que nadie más lo hará por ti. Debes hacerlo tú mismo.
Ahora, algunas personas podrían pensar, eso es una gran responsabilidad. Pero esto es lo que pienso: esa es la mejor noticia que puedes escuchar. Tienes la oportunidad de elegir tu vida. Cientos de millones de personas en todo el mundo darían cualquier cosa por vivir en la situación que tú tienes, para tener la oportunidad de tomar control de su destino. "Depende de ti" es una gran bendición!
Este es el por qué:
1. Tienes la oportunidad de trazar tu propio destino.
Tal vez quieras comenzar un pequeño negocio y quedarte allí. Eso es genial porque puedes elegir eso. Quizás quieras crear una pequeña cadena de tiendas. Tal vez quieras tener un patrimonio neto de $100 millones. Eso está bien, también. El punto es que puedes elegir. Puedes hacer lo que quieras. Diferentes personas tienen diferentes sueños y deben vivirlos en consecuencia.
2. Cosechas lo que siembras.
Duerme y ve a trabajar tarde y cosecha lo que hiciste. O levántate temprano y trabaja más que los demás y gana un mayor rendimiento. Invierte tu capital con algo de riesgo y gana una rentabilidad. Coloca tu capital en mayor riesgo y quizás obtenga un mayor rendimiento. Tú decides lo que sembrarás y, por lo tanto, lo que cosecharás.
3. Nadie más puede impedir que logres tu sueño.
Sí, siempre surgirán obstáculos y personas a las que no les guste lo que estás haciendo, pero puedes seguir adelante y trazar tu propio rumbo. Hay gran libertad en eso.
4. Experimenta la alegría de la autodeterminación.
No hay mayor orgullo que saber que pones tu mente en algo y lo logras. Aquellos que viven con una mentalidad de víctima nunca llegan a experimentar la alegría del logro porque siempre están esperando que alguien más venga al rescate. Aquellos que asumen la responsabilidad viven la alegría de ver un trabajo bien hecho.
Déjame hacerte una pregunta: ¿Dónde estarás en cinco años? ¿Diez años? ¿Veinticinco años? ¿Tú sabes? ¿Tienes una idea? ¿Alguna vez has soñado con eso o te has fijado una meta? ¿Estás dispuesto a asumir la responsabilidad y reconocer que depende de ti?
Estarás donde decidas estar en ese punto. Tú decides. Es tu decision.
¡Y eso es muy emocionante!
